Ubicación increíble cerca de la Rambla y una terraza fabulosa con vistas a Palau Güell. Ideal para un chapuzón rápido en la piscina y disfrutar de las vistas de la ciudad.

Me exigieron el pago antes de darme la llave, como si tuviera intenciones de fugarme!

La terraza del hotel ofrece unas vistas impresionantes de la ciudad y del Palau Güell, lo cual es perfecto para relajarse tras un día explorando. La ubicación es inmejorable, a solo 20 metros de Las Ramblas y muy cerca de la estación de metro, facilitando el acceso a toda la ciudad. Las habitaciones son cómodas y cuentan con excelentes servicios, mientras que el desayuno buffet es variado y delicioso.

Sin embargo, la presión del agua en la ducha podría mejorar para una experiencia más agradable.

El hotel tiene una ubicación increíble, justo al lado de la Rambla. Con mamá y mis hijos, disfrutamos del delicioso desayuno buffet, bien variado y con opciones sin gluten. Las habitaciones son amplias y cómodas, perfectas para relajarse después de pasear por la ciudad.

A mis hijos les habría encantado que hubiera una piscina para refrescarse después de un día caliente.

Recomiendo a quienes busquen disfrutar

La experiencia en el hotel fue notable, la terraza es perfecta para relajarse después de un día ajetreado y ofrece unas vistas increíbles de la ciudad que realmente valen la pena, es como estar en un mirador privado. El desayuno era bastante variado, algo importante para empezar bien el día, y la amabilidad del personal te hace sentir en casa.

No fue barato, pero consideré que era aceptable por lo que ofrece.

Una vista impresionante

La experiencia fue brutal. Desde mi habitación, la vista al Palau fue simplemente de película. Además, la terraza del bar era genial para relajarse después de un día explorando la ciudad. Lo único que me molestó un poco fue el check-in, un poco lento. Pero vamos, vale la pena por lo demás.

El hotel tiene una ubicación perfecta, justo enfrente del Palacio Gaudí, lo cual es impresionante. La terraza tiene vistas espectaculares, especialmente al amanecer. La habitación era bastante amplia y el baño, sorprendentemente grande, contaba con una bañera y bidet. El desayuno buffet era variado, aunque podría mejorar en opciones. Sin embargo, el servicio en la recepción fue un poco decepcionante. Nos exigieron el pago total al llegar, lo que nos hizo sentir incómodos, especialmente después de un largo viaje. Además, notamos que no hay minibar en la habitación, lo cual es realmente molesto, sobre todo con el calor que hacía, ya que debíamos bajar a la calle para conseguir agua fría. El ruido en los pasillos era otro pequeño inconveniente, aunque la habitación en general era tranquila. En resumen, el hotel tiene un gran potencial, pero la falta de ciertas comodidades y la política de pago podrían mejorarse.

La ubicación del hotel es realmente inmejorable, justo al lado de la Rambla, lo que facilita explorar la zona. La habitación era pequeña pero cómoda, y el amplio baño era un gran plus. Sin embargo, las camas parecían un poco duras para mi gusto. El desayuno buffet fue excelente y variado, lo que fue un gran inicio para cada día.

Me encantó todo del lugar! ! Así que tranquilo y cómodo, ¡talmente perfecto para relajarse en la terraza!

La habitación era bastante amplia y muy cómoda, perfecta para relajarse después de pasear. Teníamos un pequeño balcón con vistas al Palau Güell, lo cual fue genial. El baño estaba limpio y tenía buenas instalaciones. El aire acondicionado funcionaba de maravilla, ideal para el calor de Barcelona. Lo único fue que a veces se escuchaba ruido del pasillo, pero en general fue un buen espacio.

la ubicación es genial, justo al lado de la rambla. el personal es muy amable y conocedor, incluso nos trataban como amigos. el servicio de habitación fue excelente, y disfrutamos del tiempo en la soleada terraza del hotel.

fue un poco ruidoso a veces, quizás un mejor aislamiento ayudaría. 💤

Fue una buena elección para una visita relámpago en Barcelona con un precio excepcional. La limpieza siempre fue impecable y el personal se aseguró de que tuviéramos todo lo que necesitábamos. Recomiendo llevar agua porque puede hacer calor.

el hotel está súper bien ubicado, justo detrás del palacio guell, y la terraza tiene vistas increíbles de barcelona. la habitación era amplia y cómoda, y el trato del personal fue excelente, muy amables en todo momento. además, el desayuno estaba buenísima y variado, ideal para empezar el día con energía. la terraza es perfecta para relajarse después de pasear y disfrutar de una copa con buena compañía.

lo único chido sería mejorar el check-in porque fue un poco lento y no había minibar en la habitación, lo que hizo que conseguir agua fría fuera una odisea.